Una de las mayores incógnitas de nuestra especie radica en si hay otras formas de vida similar a la nuestra. Diversos han sido los intentos por resolver esta pregunta y la ecuación de Drake se alza como uno de los más reconocidos. El fin de esta operación no es obtener un resultado fijo, sino pensar sobre qué factores influyen en la aparición de vida inteligente más allá de nuestro planeta.