Junto a los avances en conocimiento de las diversas áreas de la ciencia hemos vivido una transformación en nuestras rutinas. La complejidad de la vida moderna y las situaciones de emergencia tales como la pandemia de covid-19 nos han impulsado a adoptar toda clase de dispositivos inteligentes para realizar nuestras tareas. Más allá de los smartphones, el presente nos entrega una visión cada vez más amplia de sus posibles usos en el futuro. Uno de estos comprende el aporte de la digitalización contra la diabetes a través de dispositivos diseñados para las distintas etapas de la enfermedad.
Un pequeño dispositivo para medir la glicemia
Una tarde de agosto estaba viendo videos de Nick Johnston, uno de mis guitarristas favoritos. Quizás se puede culpar a mi atención desenfocada, pero, entre las múltiples demostraciones de virtuosismo que este artista ha publicado, jamás había notado un pequeño detalle en su brazo hasta ese día. Un pequeño círculo blanco se posaba en la parte trasera de su brazo tatuado, el que con gracia golpeaba las cuerdas de la guitarra. Este parecía fuera de lugar e inmediatamente captó mi atención ¿Se trataba de algún tipo de dispositivo inteligente?
En mi mente, silenciosamente agradecí al usuario de Instagram que posó la pregunta antes que yo. En esta le consultaba al guitarrista si era diabético, debido al dispositivo que también había captado su atención. Nick respondió sin detalles, “yes I am (sí, lo soy)”. Este dato era suficiente para comenzar a investigar. Tras una breve búsqueda, descubrí que se trataba de un dispositivo inteligente conocido como un monitor de glucosa continuo, un frente de lucha de la digitalización contra la diabetes.
Para alguien como yo, que proviene de una familia con historial de diabetes y que también es un entusiasta de la tecnología, esto significó una apertura de puertas hacia un mundo desconocido. Aquí los dispositivos inteligentes no solo apuntaban al ocio o a actividades recreacionales, sino que eran el presente futurista del que siempre había soñado.
Revisión científica del uso de dispositivos inteligentes
Revisando revistas científicas, noté que no solo se han desarrollado tecnologías específicas para esta área, sino que también se ha revisado la utilidad de dispositivos como los Smart-watches en la salud, en un estudio publicado por la revista de Informática Biomédica en 2016. Esto, como un complemento para recopilar información importante a la hora de generar diagnósticos y conocer el historial de algunas funciones del cuerpo de un paciente.
Al leer el estudio de la Asociación Americana de Diabetes sobre el pasado, presente y futuro de la terapia de bombeo de insulina, publicado en 2019, pude conocer la evolución de estos dispositivos en función de las necesidades de los pacientes y de la tecnología disponible hasta el momento. Gracias a los dispositivos conectados de manera inalámbrica o por internet, se han creado nuevas soluciones de tamaño pequeño y adaptables al usuario, apoyandose en la digitalización para transmitir datos pertinentes al control de la diabetes.
Mejores opciones para controlar la diabetes
Recordando la experiencia de algunos de mis familiares, noté la importancia de estos avances tecnológicos en la vida de las personas. Al tener estos pequeños dispositivos injertos en la piel, no era necesario generarse una pequeña herida para tomar una muestra de sangre y realizar un test de glicemia. Los lectores de glicemia conectados a los celulares permiten a las personas tener una lectura continua y mejor controlada. Los dispositivos en función de la vida de las personas tendrían más sorpresas para mí.
Como ávido fanático de la ciencia ficción, no he podido evitar ver con una ferviente emoción los anuncios de nuevos gadgets que apuntan a facilitar nuestras tareas del día a día. Al leer la información de la Fundación Diabetes Juvenil en Chile sobre las bombas de insulina, recuerdo la narrativa del Neuromante, por William Gibson, en donde el ser humano aumentaba su cuerpo con tecnología para librarse de los límites de un ser carnal.
El fenómeno de digitalización no frena
El desarrollo de tecnología ha continuado avanzando de manera exponencial en los últimos años. Según datos de la Unión Internacional de Telecomunicaciones, el numero de la población que usa internet se mantiene en constante crecimiento y no es sorpresa que estemos estrechando nuestra relación con los dispositivos que hacen uso de las redes. Estos están recopilando información constantemente, de nosotros y de nuestro entorno. Es natural pensar en usar esta información para detectar y mejorar todo tipo de procesos en nuestro cuerpo, tal como es el uso de funciones de la digitalización contra la diabetes.
Con el apoyo de la digitalización, los dispositivos electrónicos comienzan a parecer aumentos para nuestros cuerpos. En el momento en que esta información es codificada de manera binaria para su uso en el mundo digital hablamos de este fenómeno. Es gracias a este proceso que podemos compartir información rápidamente y a bajo costo entre todo tipo de dispositivos que se encargarán de interpretar los datos.
Cuando estos gadgets se conectan a internet los conocemos como parte del Internet of Things, un concepto que es mencionado cada día más, a medida que los dispositivos inteligentes comienzan a inundar silenciosamente nuestros hogares, espacios de trabajo y ciudades. La temática puede parecer nueva, pero su ideología fue presentada tan pronto como 1991 por Mark Weiser en su trabajo sobre la computación ubicua. En esta publicación, Weiser explica el uso de dispositivos conectados entre sí en todo el entorno de la persona.
El frente local de la digitalización contra la diabetes
También pude ver el avance en tecnología de dispositivos de asistencia médica en el ambiente local. En Concepción, dos egresados de la carrera de Ingeniería Civil en Telecomunicaciones de la Universidad de Concepción habían desarrollado un dispositivo para evaluar el pie diabético en etapas tempranas. Los creadores también consideraban desarrollar una aplicación para poder tener la información disponible en smartphones y fomentar el automonitoreo de síntomas.
Mi breve repaso de las posibilidades que la tecnología ha abierto en este mundo me había dejado con la mente girando, pensando en los límites que el ser humano podrá sobrepasar.
Las posibilidades del futuro
Quizás encontraremos maneras de administrar medicamentos o suplementos de manera automatizada para reducir los problemas de atrofia o visión que el astronauta Scott Kelly describe durante su año en la Estación Espacial Internacional en su libro, Resistencia. O quizas, podríamos ver las prótesis inteligentes evolucionar hasta que el auto-mail de Full Metal Alchemist se convierta en una realidad.
Sin lugar a duda, la ciencia y la tecnología nos ha presentado un presente lleno de posibilidades. Por esto, es de vital importancia mantenernos informados, conociendo los descubrimientos y, de preferencia, siendo parte activa del progreso.