El cambio climático es un proceso natural que ocurre cada cierto tiempo en la tierra, de manera sistemática. Sin embargo, en la actualidad existe un aumento desproporcionado de la temperatura, lo que conlleva a que existan variaciones en el clima, como también, ciertos efectos en la flora y fauna.
Desde muy pequeña, me ha interesado aprender sobre el medio ambiente y los ecosistemas. A medida que fui creciendo, me di cuenta de que el clima y mi entorno ya no es igual a como cuando tenía cinco años. Además, la flora y fauna que estaba acostumbrada a ver cuando iba al parque, ya no se encuentran en el mismo estado. En cambio, no fue hasta siete años atrás, que comencé a ser consciente de que el cambio climático existe y es la principal causa de estos fenómenos.
El primer paso para comprender estos sucesos es entender que el calentamiento global y el cambio climático no son el mismo proceso, sino que el primero es la causa del segundo. Es decir, el aumento significativo de temperatura del planeta es provocado por las emisiones de la atmósfera de gases de efecto invernadero. Esto genera que existan variaciones en el clima, un aumento del nivel del mar y peligro de extinción de numerosas especies de flora y fauna. Sucesos que de manera natural no se producirían.
En segundo lugar, hay que identificar que la deforestación, la aparición de fenómenos meteorológicos, la excesiva explotación minera y petrolera, la producción desproporcionada de basura, aumento de los gases de efecto invernadero, la contaminación del agua, el empobrecimiento de los suelos son solo algunas de las causas del cambio climático.
Efectos del cambio climático en la flora y fauna a nivel global
Cuando hablamos de cambio climático tenemos que entender que este es un proceso natural que ocurre sistemáticamente en la tierra. Es un proceso periódico en el que el clima en la tierra se altera y eso afecta a los ecosistemas, la flora y la fauna.
El actual cambio climático qué se ha producido en los últimos 300 años, es distinto a los cambios que se dan en la tierra de forma habitual. Esto es porque las acciones antrópicas, es decir, acciones ejercidas por el ser humano, han acelerado este proceso, provocando principalmente que las temperaturas aumenten. Este cambio acelerado en las temperaturas es lo que provoca que los ecosistemas y las especies no generen mecanismos de adaptación ante estos nuevos escenarios.
¿Cómo ocurría antes?
El cambio climático evolucionaba de manera paulatina y esto generaba que las especies tuvieran la capacidad de adaptación a estos nuevos cambios. Es decir, esta evolución se producía en millones de años, periodo suficiente para que tanto la flora, la fauna y la geográfica aprendieran a familiarizarse con estos cambios.
Debido al proceso actual, las temperaturas y el cambio climático es tan acelerado, que las especies no tienen la capacidad de adaptación ante esta nueva realidad a la que ya se están enfrentando.
Esto provoca pérdidas de especies, variaciones en el funcionamiento de los ecosistemas y alteraciones en los ciclos hidrológicos. En general, se crea un cambio en el funcionamiento de los ecosistemas en su totalidad. Lo anterior se debe principalmente porque hay flora y fauna que no poseen la capacidad de adaptación en un corto plazo. En consecuencia, estas especies se ven afectadas directamente, lo que finalmente provoca que sus poblaciones disminuyan.
Situación actual con respecto a la flora
Conforme con el Observatorio Pirenaico Del Cambio Climático “los cambios en los diferentes parámetros climáticos y el aumento de la concentración atmosférica de CO2, influyen en la fotosíntesis y tiene efectos sobre el crecimiento y desarrollo de toda la vegetación”.
A partir de este análisis, aprendí que el cambio climático provoca cambios en varias etapas de la vida de las plantas, como la aparición temprana de los primeros brotes en primavera y la extensión de la etapa de crecimiento.
Finalmente, este estudio evidenció que los cambios en el uso de la tierra y otros factores estresantes humanos, así como los cambios en la composición, el ciclo de vida y la distribución de las plantas, pueden generar cambios en los ecosistemas que amenazan importantes servicios ecosistémicos, como la protección de especies y ecosistemas sensibles, y la provisión de sostenibilidad ecológica.
Efectos del cambio climático en la flora y fauna chilena
De acuerdo con el estudio “Biodiversidad y cambio climático en Chile: Evidencia científica para la toma de decisiones” publicado por el Informe de la mesa de Biodiversidad en 2019, este proceso “es considerado la tercera amenaza global a la biodiversidad después del cambio del uso del suelo, del mar y la explotación directa de las especies”.
Además, este informe establece que «el modelamiento bajo diferentes escenarios de emisiones de CO2 muestra que, si la temperatura global continúa aumentando y las precipitaciones continúan disminuyendo en gran parte del país, el paisaje chileno será muy diferente al actual, con grandes cambios en la distribución de los ecosistemas y las especies nativas y exóticas».
¿Qué ocurre en la región del Biobío?
Según el libro Bosques de la tierra del Biobío, la región se encuentran en un ecotono, lo que significa que es una zona en la cual existe una transición entre varios ecosistemas. “Hacia el sur aumentan las precipitaciones y disminuye la temperatura, favoreciendo a los bosques más húmedos y densos. Por el contrario, hacia el norte aumenta la temperatura y disminuyen las precipitaciones, lo que propicia un bosque más seco, de hojas siempreverdes y duras”, indica.
A la vez, este mismo estudio señala que “existe una marcada influencia longitudinal de las cordilleras, generando bosques densos en la cordillera de la Costa y precordillera andina, para luego dar paso a bosques ralos y achaparrados en los Andes de mayor altitud, hasta la completa desaparición de la vegetación en la alta montaña andina”.
¿Cómo enfrentan las especies estos cambios?
Con la finalidad de conocer más sobre lo que sucede con respecto a este fenómeno en la región del Biobío, conversé con Luis Gatica Mora, ingeniero en Conservación de Recursos Naturales. Me comentó que específicamente en esta región hay algunas especies que son más susceptibles a este cambio climático y que en sí, sus poblaciones ya son reducidas. Sumado a este cambio acelerado, las capacidades de adaptaciones son muy escasas. Por lo que promover acciones de restauración y reforestación de estas especies es fundamental.
“Especies como el Gomortega keule, Pitavia punctata (pitao) y Guindo Santo son especies que ya de por sí tienen una población muy reducida, y se ven aún más afectadas con estos cambios climáticos acelerados”, agrega.
El problema detrás de este suceso es que cuando se extinguen las especies por cambio climático, ciertas funciones que esta flora y fauna cumplían dentro de los ecosistemas, dejan de existir. Lo que rápidamente puede desembocar en pérdidas de contribuciones de la naturaleza hacia nosotros como seres humanos o más bien conocidos como servicios ecosistémicos. De aquí radica la importancia de cuidar el medio ambiente y los ecosistemas que nos rodean, porque cualquier acción, por muy pequeña que sea, puede salvar la vida de miles de especies.
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